La vida es un continuo trabajo: te despiertas y cada nuevo día te trae lo mismo de siempre, igual pero distinto... esa diferencia que te aporta es lo que hace que tu vida sea maravillosamente diferente.

martes, 15 de febrero de 2011

Dicen que hay que llamarlo locura




Buscó pisos en alquiler en La Coruña: ella pasaría igualemente Agosto en esa ciudad, pero quería que el piso fuese en la ciudad vieja, a poder ser cerca de "su querida Plaza de Azcárraga". Ve algo de especial en esa plaza, nadie sabe bien qué es, pero a veces le da por irse allí a escribir un poco o a mirar sentada desde un banco como pasan los minutos simplemente. Hay quin dice que es como su Crypton particular, su cueva donde se pierde completamente de todo... yo creo que no la conocen, deberían saber que si que tiene un poder especial en ella esa plaza... pero no hay nada como sumergirse en el mar de la cala próxima a la playa de Adormideras: ese agua es como un manantial de vida, como esas fuentes donde se obran milagros, dónde la gente cura sus enfermedades con solo mojarse... Ella solo tiene que hundir la cabeza en ese mar helado y sentir el hielo líquido en el cuerpo, ese momento en el que la cabeza se congela... se curan todas sus enfermedades (problemas).
Eso, que para variar me voy por las ramas y luego no sabemos de qué estabamos hablando.
Encontró un piso, diminuto pero encantador. En la misma Plaza de Azcárraga: una sola cama, un sofá, un largo pasillo ... un baño y una mesita con dos sillas. Tenía una ventana que tendría abierta durante todo el mes de Agosto y... poco más. Le bastaba con eso. Se quedo allí todo el mes, de vez en cuando recibía visita de su familia que le decían que porqué estaba ahí si su verdadera casa estaba en la misma ciudad... tambien iban sus amigos claro. Hacía la misma vida que si viviese en Madrid y Coruña juntas, eso era improbable pero bueno.
Y se quedo allí todo el mes, y deseo incluso pasar allí toda la vida.


Me gustan las locuras, sí: esas cosas que haces porque las sientes y si no las haces en ese momento luego ya no tienen sentido o ... tal vez si lo tengan pero ya no existe la posibilidad de hacerlas.
Me gusta proponer una salida a las tres de la mañana cuando ya estoy en pijama, metida en la cama y al día siguiente hay clase. Me gusta salir en medio de clase porque me parece aburrida e insípida, inaprovechosa e inútil e irme a dar una vuelta por Sol o Gran Vía. Me gusta no pensar en la factura del teléfono si un día me apetece llamar a alguien para decírle algo que se me ha metido entre ceja y ceja.
Si un fin de semana quiero ir a Coruña y no tengo manera, muevo viento y marea para que el barco llegue a puerto. Da igual que haya estado hace unos días o que aquí en Madrid el plan sea interesantes.
Me gusta tener la iniciativa de comer una ensalada en invierno en la playa, salir sin medias, dejar el paraguas en casa, hacer que hago así las cosas habiendolo pensado antes y no enseñar que es así, tal cual, como me salen.
Me gusta ir a una mercería, comprar metros de tela y pensar que sabré coser un vestido. Me gusta intentarlo y ver en el armario todavía los trozos de tela.
Me gusta salir por la noche en Gandía con gente que he conocido esa misma tarde, me gusta salir y acabar hablando a la siguiente tarde con otra gente.
Me gusta mirar precios de vuelos a países lejanos a los que espero ir tarde o temprano.
Me gusta reservar un pequeño piso para Agosto en la Plaza de Azcarraga, ¿no sería genial?


(((maca)))

La pintura es de Jesús Ruiz Fernandez

1 comentario:

  1. y a mi tb me gusta comprar la tela para darle un corte y nada mas, y pensar que de ahí voy a sacar un traje divino verdad? :D
    yo tb veo genial todo eso que dices... y lo de venirte a coruña... hazlo mas veces! :)
    me dio mucha pena despedirme de ti ayer en el aeropuerto pensando que aun asi te veo en dos semanas tres como mucho :( pero me dio pena!
    VIVA AZCÁRRAGA!
    te quierooo maca!!
    FER

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