La vida es un continuo trabajo: te despiertas y cada nuevo día te trae lo mismo de siempre, igual pero distinto... esa diferencia que te aporta es lo que hace que tu vida sea maravillosamente diferente.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Diciembre y helados

Llegó Diciembre, así, casi desprevenidos nos ha cogido apresurados recordando los últimos días de agosto. Agosto, verano.. que lejos queda eso.
Ayer hablando con mi madre, abrazada a ella despues de un tiempo, me preguntaba si había escrito algo más, ¡si escribo algo casi cada día! Piensa que no me gusta que ella lea lo que escribo y yo siempre digo lo mismo: mamá si escribo y lo cuelgo es porque quiero que más gente lo lea, ¡si uno de Japón se mete por casualidad ( y entiende el castellano) pues bienvenido sea!
No escribo pensando en quién me leerá aunque es cierto que a veces pensarlo influye y hace que varien algo las palabras... creo que es normal.
Abrazada a mi madre me dice que porqué no escribo sobre el verano, ¡con lo que a las dos nos gusta! Pero no me gusta tanto que me digan sobre qué puedo escribir... porque eso hace que tenga que hacerlo y no me gusta que me digan que tengo que hacer. Sé que mi madre me lo dice por darme ideas, y como a ella le encanta el calor, la playa, el mar etc pues me lo dice porque así, si escribo sobre ello, para ella será como volver a vivirlo.
Realmente, después de la salida de clase y el paseo con Lara por Sol solo me apetecía escribir de Diciembre, Navidad... pero puedo hacer un compendio entre Navidad y verano, ¿o no?
Creo que no miento si digo que el verano es de las cosas que más me gustan del año, y digo más: el verano es de las cosas que más me gustan de la vida. Claro está que el verano lo uno a vacaciones, familia, amigos y mi casa y el mar. La Coruña, Gandía, sol, a ver quién está más moreno, agua templada o muy fría. Paseos con helado, noches que amanecen y bocadillo de atún. ¡Que complicado hablar del verano con este frío! Sí, hace frío, y si yo lo digo es que lo hace realmente porque no soy friolera que digamos...
Bueno, sigo con el verano: que no entiendo coómo hay gente a la que no le gusta, ¡está claro que su contexto será diferente al mío porque me parece que en mi contexto es imposible que no guste! Levantarse de MI cama y que esté mamá preparando el desayuno, que nadie tomé la leche caliente y que al bajar a pasear al perro el cesped esté verde verde. Subir en el ascensor e ir pensando en dónde deje la crema de sol el día anterior... ponermela en todo el cuerpo, dar un beso a mi madre e irme si me voy sola o darle un beso e irnos las dos.
Playa, ¡que maravilla! El sol que empieza a calentar la piel y luego la va volviendo dorada. El calor excesivo y la necesidad de bañarse, estar en la mejor cala del mundo y que al bañarte se te corte la respiración/circulación, ¡es perfecto!
¿Y qué me dices de la ropa de verano? Mucho mejor que las medias de invierno, las camisetas d emanga larga, jerseys, bufandas, zapatos cerrados... ¡vivan las faldas cortas, la pierna morena y los vestidos de tirantes! VIva el ir descalza por la arena y viva la falta de resfriados.
Diciembre, ¡que ha llegado! Me encanta ir por las calles de MAdrid y que esté todo iluminado, que se oigan villancicos aunque tal vez sea algo temprano... me encanta que haya nevado aunque no cuaje, y me encanta el olor a castaña aunque no me gusten. Me gusta que el aire frío me de en la cara, me gusta el frío, pero solo cuando en Navidad, ¡y queda tan poco!
No sé que nos deparará diciembre ni el próximo verano, pero lo cojo con ganas.

(((maca)))

3 comentarios:

  1. Claro que sí!!! Diciembre y helados... me gusta!
    MUAAAAAA

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  2. Nos has intentado adelantar la "Navidad". Cuando llegan estas fechas siempre recuerdo este pensamiento: "Ojalá sea siempre Nsvidad", pero entendida como amor, entrega, solidaridad, y....¡tantas cosas!... Félix

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  3. ¡Precioso,Maca!
    Diciembre y verano, dificil unirlos, pero lo has hecho, como siempre, ¡perfecto!
    Cande

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