La vida es un continuo trabajo: te despiertas y cada nuevo día te trae lo mismo de siempre, igual pero distinto... esa diferencia que te aporta es lo que hace que tu vida sea maravillosamente diferente.

lunes, 11 de junio de 2012

Qué tipos de personas hay

Somos seres sociales, pero cuanto nos cuesta a veces serlo: a mi por lo menos.
Creo que hay dos clases de personas: a las que les cuesta quedarse solas y a las que les cuesta estar con alguien. Evidentemente con lo primero no me refiero a estar solo en el metro camino del trabajo ni en el segundo caso a ir a tomar algo con los amigos, por ejemplo.
La primera clase de personas, que no es mejor por ser primera sino es que simplemente tenía que enumerarlas, necesitan la compañía para casi cada una de sus acciones o labores, incluso cotidianas. Por lo general no les gusta desayunar solas, si van a la universidad/trabajo y no encuentran allí buenos amigos pueden verlo o interpretarlo como un problema, si necesitan dar un paseo para desfogarse necesitan algo más que su sombra sus pies y su cabeza. Cuando van a hacer la compra prefieren ir acompañados, igual que cuando van a la playa, a correr, en bici o a pasear al perro.
La segunda clase de personas disfrutan de la soledad del desayuno: unos quizá porque todavía no están despiertos del todo y saben que con la soledad no van a gruñir; otros porque les gusta el silencio, simplemente. Imagino que hay más opciones pero no voy a dedicar mi vida a estudiarlas, así que si os parece hablo de lo que conozco y lo desconocido lo guardamos. Estas personas necesitan estar solos en el sofá y dar un paseo tan solo con su sombra.

Como casi siempre, hay de todo en cada sitio: los que necesitan compañía no han de estar rodeados de gente las 24 horas del día, en realidad, según la persona, la necesidad ronda entre 22 y 8 horas diarias. Hablo de necesidad, por eso mismo hay una distinción porque tanto los primeros pueden querer a veces estar solos o los segundos estar en compañía, por eso hablo de una necesidad primordial comparable casi a respirar. Las personas del primer tipo si pasan más de dos días solas probablemente tengan un momento bajo de autoestima, no se sientan queridas o se planteen alguna duda existencial; si nada de eso ocurre al menos verán fotos del pasado, escucharan música que les trae recuerdos complicados o mandan un mensaje a alguien al que prometieron no volver a escribir. Quizá por ello nunca quieren quedarse solos. Puede que esto se deba también a una falta de confianza en uno mismo, a no querer recapacitar, pensar un poco más allá de "qué me voy a poner hoy", "qué hacemos de comida" y "a qué hora ponemos el despertador". Puede ser también a que tengan tantas cosas que aportar a los demás que no quieran quedarselas solo para ellos.

Para las personas que necesitan momentos de soledad casi como el respirar el rango de horas es diferente: ronda entre la 1/2 hora y las 6 horas. Tanto en este caso como en el primero hay excepciones. La respuesta a porqué la necesidad de soledad suele ser más breve que la necesidad de compañía es bien simple: cuando uno esta solo es más fácil hablar con su interior, tarda menos que alguien que necesita reírse con su amigo, ir aq correr con su primo y salir de fiesta con los compañeros de trabajo, como necesidad. Si las personas del segundo tipo pasan por distintas y muchas posibles razones, más de 3 días sin un solo momento, más que los necesarios y humanos que compartimos todos, de soledad, pueden sufrir un grave trastorno en su manera de actuar: empeora su humor, pueden volverse irascibles, aumenta su sensibilidad y las ganas de volver a aquellos días o momentos en los que podían disfrutar de sus momentos de soledad.

Hay personas que son en un 80% del primer o segundo tipò, y en un 20% del otro; aquí se encuentra un buen número de gente, los que tienen un 60% - 40% o un 40% - 60% son la mayoría. La minoría son los que son en un 90 % de un tipo o de un 100% , esto es un problema puesto que los seres humanos sociales somos humanos, necesitamos relacionarnos y también necesitamos momentos de soledad para encontrarnos con nosotros mismos y con las ideas de los demás. Los extremos nunca son buenos.

Yo me considero del segundo tipo de personas, creo que en un 60% o 70%.


(((maca)))

2 comentarios:

  1. Me encanta! Es que es tan verdad... A veces por no tener esto en cuenta juzgamos tan a la ligera... Me gusta! ... como siempre
    MUA

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  2. Pero que lista eres! Me ha hecho pensar... MUA

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