Escucho tu voz desde mi móvil de segunda o tercera generación, no puedo escuchar ni ver tu garganta vibrar aquí en directo porque te tengo un poco lejos, pero aun así tú sigues cantándome, a través de YouTube o algún video cutre que te hice hace un tiempo cuando vivías solo a unas manzanas de mi casa. Pulso el botón de play y suena la canción que acabas de grabar, dices que estás seguro de que me gustará.
Suena tu guitarra nueva y me gusta, y cuando cantas la primera sílaba yo ya me había enamorado de esa canción, porque puede sonar fanático o rídiculo pero todo lo que tú cantas estremece cada vello de mis brazos, y en muchas ocasiones un escalofrío – o varios- recorren un camino desde mi estómago hasta el pecho. Acabo de decírtelo, creo que te quiero demasiado, y no sé si se puede llegar a querer demasiado a alguien, o simplemente te quiero más y más; lo cierto es que eres más que importante en mi vida. Eres todo para mi en tantísimos aspectos…
Llueve y pienso que deberías estar aquí para escondernos en algún portal y dejar salir vaho y humo con sonrisas de nuestras bocas, para que nos metamos en un bar y solucionemos nuestro mundo de dudas, para que me cuentes tus ideas, y las de tus fans, y yo te cuente las mías. Y para recorrernos Madrid a grandes pasos, para descubrir calles y canciones nuevas.
(((maca)))
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...Me uno a tu precioso escrito y levanto mi copa porque,hoy y ahora, quiero brindar por vosotros dos:
ResponderEliminarDos ¿pedacitos? muuuuy importantes de mi corazón.
De corazón a corazón vuestra madre y mami.
Yo también lo echo de menos!! Missing Bou a lot!! Os quiero hermanos!!
ResponderEliminarVaya preciosidad. Da ganas de enamorarse leyendo algo así.
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