Quizá lo
inventen en un futuro, no estaría nada mal que creasen un aparato que indicase
el “momento clave”. Que qué es el “momento clave”, ahora lo explico.
Seguro que
te ha pasado, cuando algo bueno se acabó (las vacaciones por ejemplo) y una vez
que ha pasado piensas en ello y te dices a ti mismo “debería de haber
aprovechado más ese momento, ser consciente de qué eso que viví era auténtico,
magnífico”. A veces no le damos suficiente importancia a ciertas cosas que, una
vez pasadas, las vemos como valiosas. Imagínate un día de tus vacaciones de
verano, un momento en el que te hayas enfadado con alguien o hayas pensado que
cierto momento del día hubiese sido mejor borrarlo. ¿A que ahora te hubiese
gustado revivir incluso esos momentos? Claro, a mi también, no somos tontos.
Si nos
gustaría revivir hasta esos momentos “amargos”, imaginaros lo útil que podría
ser que en ese instante algo/alguien te alertase, te recordase de que ese
momento es único, que no volverá a repetirse y que eres tú quien vive el
momento real y por lo tanto eres tú quien decide si ese momento vale o no la
pena.
Pienso en
todo esto ahora, que estoy en la paz más absoluta, cuando todos se han ido a la
cama y yo escribo en mi ordenador, fuera de la casa, sin más ruido que el de
unos grillos a lo lejos. “Esto es vida” – pienso- “ahora no necesito que nadie
me diga que he de disfrutar este momento porque lo estoy viviendo con total
intensidad pero ojalá alguien me recordase esto cada día”.
Hace unas
semanas conocí a un chico, lo típico: de noche él te mira, tú le miras; te
acercas con la mejor de las excusas “soy relaciones públicas” y él no rehúye a
la oportunidad de pedirte el número de teléfono. Habláis un rato, sin
pretenderlo empezáis a conoceros y… ya sabéis la historia: varios días buenos.
Un día piensas en él y te das cuenta de que, no sabes cuándo, la cosa cambio, no sabes cuándo pero él o tú
ha dejado que el tiempo pase y os habéis ablandado. Y ahora es cuando mi
cabeza, que aunque no siempre parezca estar dando vueltas a algo la verdad es
que suele hacerlo, se pregunta por qué nadie, cuando nos estábamos conociendo y
todo era perfecto me dijo “Maca, aprovecha el día de hoy, que quizá mañana no
vuelvas a vivir esto”. No quiero personalizar, pero me valgo de ejemplos.
Esta noche
quiero reiterar lo que me he dicho a mi misma ya varias veces “disfruta cada
momento bueno, déjate empapar por los menos buenos y aprende, vive, y si algo
malo se pone de por medio… sal a correr, desfógate, escribe, pinta, baila,
salta… lo que sea, pero termina con una sonrisa y duerme”.
(((maca)))
Para eso, lo mejor el libro "el poder del ahora", que seguro ya lo has leído, verdad?
ResponderEliminarGracias por recordar que hay que "pellizcarse" de vez en cuando para disfrutar a tope ciertos momentos, normalmente vamos como motos sin mirar a nuestro alrededor.
Enhorabuena por tu blog.
Un besote!
Angel María.